lunes, 9 de octubre de 2017

MEGACIVILIZATION


Hace décadas que no jugaba a este juego. Sí. DECADAS.

Desde principios de los años 90, cuando en la asociación cultural "Alas de Dragón" de la escuela de aeronáuticos, nos reuníamos de forma improvisada cualquier mañana y decidíamos echar el día jugando. Por supuesto las clases de la universidad pasaban a un segundo plano para una tarde de "pellas" y probablemente cervezotas nocturnas comentando la partida.

Buenos tiempos sin preocupaciones y con tiempo para estos juegos monstruosos y jornadas maratonianas.

Así que una partida de civilización, pasados más de veinte años en el club "Dragón" (sin alas), con 18 jugadores era una proposición tan, tan, indecente que no podía rechazarse.

Civilizatión es un juego muy entretenido. Viejo. (Publicado en 1980)De cuando los juegos eran diseñados para gente sin prisas.
Hoy se diseñaría para jugarlo en dos horas. Pero en 1980 la vida era más lenta y los jugadores más "hardcore". Y nosotros no teníamos mujer e hijos.

(Conste que hoy se hacen juegos temáticos ma-ra-vi-llo-sos que además no requieren un día de tu vida para jugarlos. Lo bueno, si breve, dos veces bueno)

Por otra parte, 18 jugadores en una mesa es algo que nunca había conocido. Y esto fue lo mejor de la experiencia. Es muy bonito ver a tanta gente moviendo cartoncitos y armando jaleo mercadeando y tratando de conseguir una carta de grano más a cualquier costa.
Parada para comer y hasta la noche.

Van aquí unas fotos de la partida quie hablan por sí solas:

Comienza la expansión por el orbe:


En una mesita aparte se colocaron los marcadores de censo, avance y las cartas de civilización:


Ummm..., la cosa se va complicando:


Tiempo de mercadear. ¡Barato, barato! ¡Vamos chica aprovéchate todo gueno gueno!


 Hay quien iba provisto de sofisticados instrumentos mercadotécnicos:


 partida grande, grande.


Grata partida para el currículum lúdico. Creo que todos quedamos con buen sabor de boca para que en el futuro se repita la experiencia para este u otro juego similar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario